La afasia es un trastorno del lenguaje que se produce, generalmente, como resultado de una lesión cerebral, típicamente en el área del cerebro responsable del lenguaje. Esta lesión puede ser causada por un accidente cerebrovascular (ACV), traumatismo craneoencefálico, tumor cerebral o enfermedades neurodegenerativas como la enfermedad de Alzheimer.

Las personas con afasia pueden experimentar dificultades para expresarse y comprender el lenguaje (oral, escrito o ambas); lo que dificulta las relaciones sociales, en las que puede causar un gran impacto. Aunque no hay dos personas con afasia iguales es muy importante apoyarnos en sus puntos fuertes para favorecer su comunicación en el día a día o la terapia.

A continuación, vamos a dar algunas pautas generales y específicas para favorecer la comunicación con estas personas. De forma que se sientan escuchadas y comprendidas y no dejen de lado las relaciones sociales y la comunicación con sus iguales, lo que, por otra parte, estimulará y preservará sus habilidades comunicativas.

Pautas generales:

1.       El ambiente ha de ser lo menos ruidoso posible, de manera que la persona se centre únicamente en su voz.

2.       Capte su atención y háblele en un tono de voz normal, no grite. A veces, las personas tienden a gritar porque creen que no les escuchan, pero si no hay un problema de audición, esta es completamente normal y el problema es de comprensión.

3.       Para favorecer la comprensión, utilizamos frases cortas y simples. La conversación es totalmente adulta, pero simplificamos el lenguaje, disminuimos la velocidad en el habla y enfatizamos las palabras clave.

4.       Comprobar la comunicación con preguntas de respuesta corta, “sí” o “no”.

5.       Dele tiempo para hablar, no complete sus oraciones o acabe sus palabras, a no ser que la persona se lo pida. Intente mantener una comunicación lo más normalizada posible, con los temas habituales y no la desplace de la toma de decisiones familiares o deje de informarla de eventos importantes.

6.       Evite al máximo la sobreprotección e involúcrela en las actividades de la vida cotidiana.

Pautas específicas para aprovechar los puntos fuertes y fomentar la comunicación:

1.       Si la persona conserva un buen nivel de comprensión lectora, puede utilizar un transcriptor en su teléfono móvil. De manera que la persona le está escuchando a la vez que lee y relaciona los sonidos de la voz con las palabras, dando significado al discurso. Utilice esta herramienta cuando sea necesario, si no es necesario no la use.

2.       Puede que la persona comprenda mejor lo que le dice si se lo repite a sí misma. Anímela a repetírselo para favorecer la comprensión.

3.       Si la persona se comunica mejor por escrito, anímela a hacerlo mediante notas, e-mail, Whtasapp…

4.       En caso de que la persona tenga afectada la comunicación oral y escrita, apóyese en elementos visuales (pictogramas) y gestos.

Es muy importante que la persona afectada acuda a un centro de rehabilitación, donde podrán darle pautas más específicas para la comunicación eficaz en el hogar; pero lo más importante es favorecer esta comunicación y darle las herramientas necesarias para que se sienta capaz de comunicarse cada vez que lo necesite y pueda mantener conversaciones o expresar sus ideas con sus iguales.